Mensajes para Marcos Tadeu Teixeira en Jacareí SP, Brasil
sábado, 2 de mayo de 2015
Mensaje De Nuestra Señora Y Santa Lucía De Siracusa (Luzia) - 401ª Clase De La Escuela De Santidad Y Amor De Nuestra Señora
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Jacareí, 26 de Abril de 2015
401ª Clase de la Escuela de Santidad y Amor de Nuestra Señora
Mensaje De Nuestra Señora Y Santa Lucia De Siracusa (Luzia)
(Marcos): «Alabada sea por siempre.
¡Qué bien! Sí, el deseo que tenía de hacer esto era muy grande, toda la semana estuve con ganas de hacer esto y hoy lo hice ¡y fue muy bueno!»
(María Santísima): «Hijos míos, hoy, primer sábado de mes, os reunís aquí, en Mi Capilla, para consolar a Mi Corazón Inmaculado.
Mi Corazón Inmaculado pide amor, pide consuelo, pide reparación. Qué gratos son para Mí, Marcos, los diez Rosarios que habéis rezado hoy durante el día, recorriendo todo Mi Santuario. Si la gente, si Mis hijos fueran como vosotros habría oración por todas partes en este Lugar, durante todo el día. Pero la gente es tan fría y tan perezosa y no viene a este Lugar para orar.
El espíritu de la verdadera oración necesita llenar de nuevo los corazones de Mis hijos, porque sólo la oración puede disminuir la gran tristeza de Mi Corazón al ver la pérdida de tantos de Mis hijos, y al mismo tiempo ver cómo el demonio gana cada vez más terreno en el mundo, en las naciones, en las familias y en las almas. Hay que detenerlo con más oración.
Por eso quiero que todos Mis hijos hagan los grupos de oración que he pedido por todas partes, aunque al principio sólo oren tres o cuatro personas, pero que empiecen. Porque sólo una gran fuerza de oración puede salvar ahora a la humanidad que está al borde de un gran peligro, de un gran mal.
Rezad, rezad más y más, porque sólo la oración puede evitar todos estos males. Sólo la oración puede atraer la Paz sobre ti, sobre el mundo entero.
Cuando el Señor vea a estos grupos de oración que os pido, esparcidos por todas partes rezando, enviará rápidamente al Ángel de la Paz para dar la Paz al mundo. Así que hijitos, ¡orad, orad, orad! Y no perdáis ni un solo momento en que podáis orar, porque vuestras oraciones unidas a las Mías acelerarán el Triunfo de Mi Corazón Inmaculado y liberarán a muchas almas de las garras de Satanás.
Deseo que vuestros corazones tengan más amor, amor al Corazón de Mi Hijo Jesús, amor a Mi Corazón Inmaculado, porque lo que Nuestros Dos Corazones buscan en vosotros es el amor, el verdadero amor. Que este amor inflame vuestros corazones, que este amor se extienda, se difunda por todos los corazones de Mis hijos para que el mundo tenga Paz.
El verdadero amor por Nuestros Corazones Unidos atraerá al Espíritu Santo y con el Espíritu Santo vendrá Su Era, Su Era de Amor. Así que hijitos, rezad, rezad y rezad sin cesar para que cada vez más almas abracen la Devoción a Mi Corazón Inmaculado. Pues Yo digo Cuantas más almas comprendan que Mi Corazón no es amado, que el Corazón de Mi Madre busca el amor de Sus hijos y que el amor que Yo deseo es un amor puro, desinteresado, fiel, leal, servicial.
Un corazón que Me busque de verdad, no por Mis gracias, sino para consolarme, para amarme, para darme a conocer y hacerme amar por Mis hijos. Un amor que lucha por Mí de sol a sol todos los días. Un amor que piensa en Mí las veinticuatro horas del día. Un amor que sólo tiene un objetivo en todos sus sentimientos y en todos sus deseos: amarme, consolarme y hacerme conocer y amar por todos Mis hijos.
Es un amor así el que busco, un amor que se entrega, que se da, que se ofrece a Mí sin límites. Un amor como el de Mi Alfonso de Ligorio, de Mi Geraldo Majella, un amor como el de Mis Pastorcitos de Fátima, de Mi Bernardita de Lourdes y de Mi Marcos de Jacareí.
Este es el amor que quiero de Mis hijos. Cuando Mis hijos tengan Mi Espíritu, es decir, cuando Mis hijos tengan este verdadero amor por Mí. Cuando Mis hijos vivan por Mí y en Mí, todos los días de su vida. Entonces verdaderamente Mi Corazón Inmaculado triunfará en el mundo y el Espíritu Santo vendrá con Sus poderosos rayos a purificarlo todo, a santificarlo todo y a comenzar la Era del Espíritu Santo en este mundo en el que vivís.
Hijos míos, rezad el Santo Rosario todos los días, pues sólo con el Rosario puedo inflamar los corazones de Mis hijos dándoles esta Mi Llama de Amor. Rezad con el corazón, haced viva la oración con el corazón que agrada a Dios.
Rezad el Rosario con el corazón, rezad todos los Rosarios que os he pedido que recéis, todas las Horas Santas con el corazón. Porque sólo así el Espíritu Santo y Yo visitaremos vuestros corazones.
Os bendigo a todos con Amor desde Fátima, desde Kerizinen y desde Jacareí».
(Santa Lucía): «Amados hermanos Míos, Yo, Lucía estoy de nuevo feliz de estar hoy con vosotros.
Os amo, os estrecho a Mi Corazón, os bendigo y os digo: ¡orad con el corazón para que vuestra oración os transforme y transforme el mundo! Reza con el corazón para que tu oración se eleve hacia Dios como una nube fragante de incienso. Y que el Señor se complazca en el olor de tus oraciones hechas con amor y cuidado, y te colme con una lluvia de abundante Gracia y Misericordia.
Rezad con el corazón para que el bien triunfe dentro de vosotros, y no permitáis nunca que el mal entre en vuestros corazones.
Os invito a una vida de amor, de mayor amor a Dios y a la Madre de Dios. Amad más al Señor y a Su Madre, consolad sus corazones con una vida recta, con un deseo sincero de hacer todo lo posible para consolarlos y amarlos y para que se sientan mejor.
Vive de modo que cada día, cuando los Corazones de Jesús y de María miren al mundo y comiencen a llorar por los pecados que ven. Puedan volver Su mirada hacia ti y al ver el amor de tus almas y corazones, al ver tus buenas obras se sequen Sus Lágrimas, dejen de llorar y vuelvan a sonreír. Que tu vida sea un continuo consuelo de los Corazones de Jesús y de María.
Os quejáis de que trabajar por Dios y por la Santísima Virgen es demasiado difícil, demasiado costoso. Pero precisamente por eso, hermanos míos, ¡es tan grande el valor meritorio de trabajar por Dios!
Cuanto más difícil es el servicio a Dios y a Su Madre. Cuanto más os cueste rezar el Rosario, rezar la Trezena, rezar la Setena, rezar las Cinco Avemarías, las Horas Santas de Oración de cada día. Cuanto más te cueste esto, más valor y méritos tendrás ante Dios.
Si fuera de otro modo, ¿qué méritos tendrías para la vida eterna? Por tanto, sirve a Dios y sirve a la Madre de Dios con alegría, con amor, con verdadera entrega, para que tus buenas obras agraden a los Corazones de Jesús y de María y te hagan sonreír de nuevo.
Vive con los ojos puestos en el Cielo, que es el objetivo y la finalidad de tu vida aquí en la tierra. ¿De qué le sirve a un hombre ganar el mundo entero, si pierde su alma y ésta cae en el infierno?
Piensa en esto y verás cómo todo lo que los hombres quieren y buscan en la tierra es vanidad. Lo único verdaderamente importante que hay que buscar es el Cielo, la salvación de vuestras almas y de las almas de vuestros hermanos.
Vive así, y verás lo preciosa que será tu vida a los ojos de Dios y a los ojos de la Madre de Dios. Tu vida será como una joya preciosa que Ellos apreciarán, que Ellos amarán mucho, y tu vida embellecerá este mundo adornado por el pecado.
A todos bendigo con Amor desde Siracusa, desde Catania y Jacareí».
Participa en las Apariciones y oraciones en el Santuario.
Infórmate en el Tel: (0Xx12) 9 9701-2427
Retransmisión en directo de las representaciones todos los días.
Sábados a las 15:30 - Domingos a las 10:00.
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