domingo, 1 de noviembre de 2015

Ven Santísima Trinidad, Sagrada Familia y San Miguel con todos tus ángeles guerreros para proteger las palabras de Dios a Su hijo, 6 am

Mi muy amado hijo e hijos esta es María vuestra Madre. Os quiero mucho a todos. Gracias, hijo Mío por tratar a Mis hijos anoche con tanto amor cuando estabas tan cansado. Como os he dicho cuando tratáis a todos vuestros hermanos y hermanas con amor, Me estáis tratando a Mí con el mismo amor. Cuando abrazas a uno de tus hermanos y hermanas, soy Yo quien te devuelve el abrazo con amor, y también Mi Hijo y todo el Cielo. Tu amor hacia los demás es Mi amor hacia ellos y su amor hacia ti es Mi amor hacia ti cuando el amor es puro y santo. Cuando vives en estado de gracia y sigues los Diez Mandamientos, tu amor hacia los demás es todo el amor del Cielo hacia los demás y su amor hacia ti es todo el amor del Cielo hacia ti. Así es como deseo que vivan todos Mis hijos. Esto es vivir en Voluntad Divina con todo el Cielo. Cuando amáis a los demás con lujuria, esto es vivir en la voluntad de satanás y la lujuria os llevará al infierno. Hijos míos, por favor, vivid en el amor de vuestro corazón y espíritu y no en la lujuria de la carne y el pecado de satanás.

Hijos míos, podéis ver que todos los mensajes de Mi Hijo y de Mí, vuestra Madre, se están cumpliendo en vuestro país y en el mundo. Como os hemos dicho, el castigo de vuestro país y del mundo seguirá empeorando. Tu país y el mundo han eliminado todas las leyes de Dios y las han sustituido por las leyes de satanás. Ningún país o mundo puede vivir en las leyes de satanás mucho tiempo sin destruirse a sí mismo. El objetivo principal de satanas es destruir a todos los hijos de Dios, matarlos en estado de pecado mortal y llevarlos al infierno por toda la eternidad para torturarlos eternamente. Los Diez Mandamientos de Dios son para llevar a todos Nuestros hijos al Cielo en amor y paz y alegría y felicidad de espíritu en amor celestial para siempre jamás por toda la eternidad con todos los santos ángeles y santos.

Mis amados hijos dejad que esto sea una lección para enseñaros a todos a vivir en la voluntad de Dios para que podáis estar con vuestra verdadera Madre y Padre por toda la eternidad. Mi Padre quiere hablar a Sus hijos.

Mis amadísimos hijos, Mis Diez Mandamientos no fueron dados para hacérselo difícil a todos Nuestros hijos. Fueron dados para hacérselo fácil a todos Nuestros hijos. Nuestros hijos son humanos y tienen la debilidad del pecado original. Tienen que tener una pauta y unos límites por los que regirse y vivir, y los Diez Mandamientos son las leyes del Cielo.

Mis queridos hijos, podéis coger todas las leyes y cambios que el mundo ha hecho a lo largo de toda la historia y desecharlos y vivir sólo según los Diez Mandamientos y todos Mis hijos se salvarían. El mundo ha cambiado todo lo que Yo, vuestro Dios, hice perfecto en los siete días y lo ha cambiado una y otra vez y lo ha hecho tan imperfecto que todo el aire, la comida y las condiciones de vida están tan desordenados que Mis hijos ya no pueden vivir en este mundo.

Por eso vivís ahora en el Apocalipsis, al final de la Biblia. Esta era de tiempo está terminando y la nueva Era de Paz está a punto de entrar en tu mundo. Hay que destruir todo lo que satanás ha enseñado a hacer a Mis hijos que es pecaminoso para destruir vuestra tierra. Debo renovar tu tierra para la nueva Era de Paz. Prepárate con un alma pura para que pueda llevarme a la mayoría de Mis hijos al Cielo y dejar a algunos para repoblar Mi nueva tierra igual que con Noé y el diluvio. El momento ha llegado y es ahora y ahora estáis pasando por esta purificación. Ama al Padre de Todo, al Dios de Todo y al Hacedor de Todo en siete días. Ama, Padre.