sábado, 20 de diciembre de 2014

Ven Santísima Trinidad, Sagrada Familia y San Miguel con tu protección de las palabras de Dios con todo el Cielo para la Navidad

Vuestro Padre hablará.

Hijos míos os bendigo a todos con una bendición especial para Navidad. Os quiero mucho a todos. Por favor, rezad por todas las pobres almas del Purgatorio para que sean liberadas en Navidad y estén Conmigo en el Cielo. Por favor, rezad por todas las almas perdidas de la Tierra. Por favor, rezad por la paz en el mundo antes de que todo se derrumbe y caiga. Rezad por todos vuestros dirigentes para que no hagan estallar ninguna bomba importante que desencadene una tercera guerra mundial. Hijos míos rezad, rezad y rezad.

Hijos míos, vosotros sabéis y yo sé que los tiempos de los que hablé en el Apocalipsis están sucediendo en este mismo momento. Hijos míos, está mucho más avanzado de lo que vuestros dirigentes y medios de comunicación cuentan. Rezad como nunca antes habéis rezado y estad preparados para morir y tener vuestras almas en estado de gracia. Sabéis que esta es la época del año en la que satanás quiere hacer todo lo posible para deshonrar a su Dios y al vuestro, pero vuestro Dios tiene el control, pero necesito vuestras oraciones y vuestro libre albedrío para salvaros. Tu libre albedrío está en tus manos y no te lo quitaré sin tu permiso, pero cuanto más tiempo se lo des a satanás, más sufrirás tú y todos tus hermanos y hermanas. Soy un Dios amoroso y también un Dios justo, pero tú controlas el sufrimiento o la alegría y la paz que tienen lugar en el mundo. El pecado causa sufrimiento en el mundo. La santidad y el amor verdadero causan alegría y paz en el mundo. De vosotros depende, hijos míos, cuánto debe sufrir el mundo.

Hay mucho más que decir, pero ya se ha dicho todo muchas veces y le dije a Mi hijo que había terminado de advertirte. Ahora depende de vuestras oraciones cuánto sufriréis. Prepárate para el momento en que te enfrentes a Mí, tu Dios, con todas tus buenas y malas acciones en tu vida. Por favor, pide perdón por todos tus pecados porque Yo acudo a ti antes de presentarme ante ti cara a cara, así que te resultará mucho más fácil. Si necesitas escribirlos en un papel y luego entregármelos, hazlo. Esto es todo. Os quiero mucho a todos, todos sois hijos o hijas de vuestro Dios. Todos sois amados entrañablemente por Mí, vuestro Dios, y por vuestra Madre María que trajo a Mi Hijo al mundo para salvar a todas vuestras almas. Por favor, no defraudéis a Mi Madre y arrepentíos por Navidad. Con amor, del Padre. Amén.