domingo, 29 de marzo de 2015

¡Ojalá confiarais, amados hijos, y no hablarais de todo o lo ignorarais!

- Mensaje nº 895 -

Hija mía. Mi querida hija. Aquí estás. Por favor, di hoy a los niños lo siguiente: Si no os convertís, hijos míos, no renunciáis al pecado, no desistís de las seducciones de Satanás, estaréis perdidos.

No queda mucho tiempo para vuestra conversión y sólo no se perderá quien haya encontrado a Jesús.

Hijos, preparaos, porque el fin está más cerca de lo que pensáis.

No lo creéis, no lo veis, vivís como si todo esto no fuera verdad, pero pronto veréis la verdad, y entonces , Mis queridos hijos, ¡ya es hora de dar vuestro Sí a Jesús!

Hijos míos. ¡Jesús ama a todos los hijos de la tierra, es decir, a cada uno de vosotros, y por este amor os concede este tiempo de preparación para que estéis verdaderamente preparados para Él y reconozcáis los signos de los tiempos por lo que son!

Dios Padre os ha creado en el amor más grande, y por este amor os da estos mensajes , ¡porque ninguno de Sus hijos tan amados se perderá!

¡Si tan sólo confiarais, amados hijos, y no hablarais o ignorarais todo!

Estos mensajes son para vuestra salvación, ¡son las instrucciones de cómo sobrevivir a estos últimos días!

Escuchad Nuestra Palabra y preparaos , porque sólo Jesús es el camino al Padre, ¡ningún otro os conducirá al Reino de los Cielos!

¡Así que dad vuestro Sí a Jesús y entregaos completamente a Él! Entonces no estaréis perdidos, ¡porque Jesús os salvará!

¡Quien tenga dudas, que sepa que las dudas siempre vienen de Satanás!

¡Así que confiad en Jesús y escuchad Su palabra, porque sólo Él es vuestro camino, y sólo con Él viviréis eternamente y realizados!

Así que venid ahora, amados hijos, y entregaos completamente a Él yno dejéis que el maligno obtenga poder sobre vosotros.

Jesús es el camino, vuestro único camino, no hay otro camino hacia el Padre.

Antes de que el fin llame a tu puerta, Jesús te dará una última oportunidad de arrepentirte.

A quien no la aproveche, a quien siga negando la verdad, Él no podrá ayudarle, porque respetará el libre albedrío de cada uno, y a quien no decida por Él, no se le «impondrá».

Así que pensad bien, hijos míos, porque vosotros «forjáis» vuestro propio camino. Así que pensad bien a dónde os debe llevar.

Amén.

Os quiero.

Vuestra Madre del Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la salvación. Amén.

«Hijos míos, no dudéis, sino orad al Espíritu Santo . Amén». Vuestra Madre del Cielo, que tanto os ama.