Mensajes para John Leary en Rochester NY, EEUU
domingo, 11 de abril de 2010
Domingo, 11 de abril de 2010

Domingo, 11 de abril de 2010:
Jesús dijo: “Mi gente, algunas personas tienen que ver las cosas por sí mismas para creer algo. Incluso Mis apóstoles al principio no querían creer a las mujeres en la tumba ni a los discípulos en el camino a Emaús que Yo había resucitado. Así que cuando San Tomás no Me vio la primera vez, esta necesidad humana de examinar Mi apariencia todavía causaba su duda. Una vez que aparecí cuando San Tomás estaba allí, esta es la razón por la que quería que sintiera Mis heridas para que pudiera ver que Yo era carne y hueso. Entonces enfatizé a San Tomás que creyera en Mi Resurrección y quitara su duda. Este relato en las Escrituras también es más prueba para cualquier no creyente de que realmente morí y resucité de entre los muertos. Esta victoria sobre el pecado y la muerte debe ser el núcleo de su fe para creer en Mis palabras de que realmente soy el Hijo de Dios encarnado como un hombre. Les dije a Mis apóstoles: ‘Han creído porque Me han visto, pero bienaventurados los que no Me han visto, y sin embargo aún creen que Yo resucité’. Esta es la razón por la que es importante para Mis fieles evangelizar almas, para que otros puedan oír y creer en Mí, y puedan tener vida eterna en el cielo y ser salvados del infierno.”
(Domingo de la Divina Misericordia) Jesús dijo: “Mi gente, se han preparado para este día del Domingo de la Misericordia con su Novena de oraciones, su chapleta de la Divina Misericordia a las 3:00 p.m., su Confesión y su Misa y Santa Comunión. Siguiendo esta instrucción de Santa Faustina, pueden tener la reparación debida por sus pecados perdonados y Mi misericordia los libre de esta carga. Miren Mi Imagen de la Divina Misericordia mientras rezan su chapleta y Mis gracias y misericordia caerán sobre ustedes. Esta visión de Mi Santísimo Sacramento en el monstrancio es otra fuente de Mis gracias y Mi misericordia ya que los rayos brillan desde Mi Hostia consagrada. Mi regalo de Mi Presencia Real es un consuelo para Mi gente dondequiera que Me visiten en Adoración ya sea en Mi monstrancio o en Mi tabernáculo. Regocíjense en Mi celebración de Pascua y en darme alabanza y gloria en Mi Eucaristía.”
Origen: ➥ www.johnleary.com
El texto de este sitio web se ha traducido automáticamente. Por favor, disculpa cualquier error y consulta la traducción al inglés.