domingo, 17 de enero de 2010

Fiesta del 139º Aniversario de la Aparición de Pontmain

Mensaje de Nuestra Señora

Queridos hijos míos, hoy, cuando celebran Mi Aparición en la ciudad de PONTMAIN, Francia, hace tantos años, para mostrar a Mis hijos el poder de Mi Inmaculado Corazón, de Mi Rosario, y para darles la certeza de que al final Yo triunfaré sobre el diablo y sobre todas las fuerzas contrarias a Dios y a Mí, los llamo de nuevo a la esperanza y a la confianza!

No pierdan la esperanza y la confianza, ni siquiera ante este mundo que predica que Dios no existe, que Dios está muerto y por lo tanto el mal siempre gana y prevalece. ¡No, hijos Míos! Dios está vivo, Yo estoy viva con ustedes, veo todo lo que les sucede y sé todo lo que necesitan. Las fuerzas del mal no pueden prevalecer contra aquellos que son Mis verdaderos hijos y llevan en sus almas Mi señal, la señal de Mi Amor.

Aquellos que ya han abrazado Mi señal y se han reunido alrededor de Mi señal, estos Mis hijos la estrella del abismo no podrá superarlos, no podrá separarlos de Dios y de Mí. por lo tanto, pequeños hijos, ustedes que son Mis verdaderos hijos, que Me aman y que nunca han dicho NO a Mí, Me tienen por Madre, abogada, defensora y protectora. ¡y conmigo al final, ustedes triunfarán!

Los castigos que han ocurrido este mes, las terribles inundaciones que han devastado su país, el terremoto que ha devastado este país también esta semana, y también lo que ha devastado otros países, son solo el comienzo de los dolores, hijos Míos.

No se preocupen por ello, porque muchos castigos aún ocurrirán debido a la negativa de la humanidad a obedecer Mis Mensajes y a prestar atención a lo que les he dicho y les he pedido desde Lourdes, La Salette, Pontmain, Fátima, hasta aquí en Jacareí. La tierra aún conocerá castigos tan tremendos, ¡qué dolor que nunca hemos visto! Pero tengan confianza, ¡estoy con ustedes! Soy su Madre, y los mantendré a todos dentro de Mi manto de amor, dentro de Mi Inmaculado Corazón.

Solo lo que les pido es: fidelidad, generosidad, docilidad y obediencia a Mi voz, a Mi amor y a Mis Mensajes y el resto Yo me encargaré.

He continuado rezando Mi Rosario. Aquellos que rezan Mi Rosario triunfarán: del pecado, del mal y de Satanás. porque por el Rosario Yo misma doy la victoria y Yo soy la victoria para todos Mis hijos!

A todos en este momento los bendigo con amor".