Di, hijo mío, que habrá una gran batalla en el aire, los Santos Ángeles y los demonios se enfrentarán en una lucha sin igual. El choque de las espadas de los Santos Ángeles con las de los demonios producirá grandes relámpagos y truenos que aterrorizarán al mundo entero. Entonces aparecerá la señal de la Mujer vestida de sol en el Cielo, y con un solo gesto suyo, vencerá a los demonios y a todos ellos al fuego eterno de una vez por todas, y entonces todos los hijos de mi Santísima Madre que obedecieron sus Mensajes serán reunidos por los Santos Ángeles en su presencia, y serán coronados con coronas luminosas que nunca dejarán de brillar.