Queridos niños, hoy comparto con ustedes la Paz del Niño DIOS. Queridos niños, permitan que la Paz entre en ustedes, para que a partir de hoy puedan vivir una vida más santa y más DIOS-dada.
¡Cada Navidad debe ser un encuentro de cada uno con DIOS! ¡Debe ser una entrega total de uno mismo a DIOS! Entiendan, mis niños, que hasta que pongan a Jesús por encima de todo en sus vidas, ¡nunca podrán decir que realmente son de DIOS!
Hoy los bendigo con la bendición de Jesús en nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo".