Hijos Míos, mirad, pronto vendrán las Flagelaciones Dolorosas a la tierra. Pobre humanidad. ¡Cómo va a sufrir!
Estoy constantemente en el Trono de DIVINA Justicia, intercediendo por cada uno, para que Mi Hijo no los castigue.
Hijos Míos, ¡cambiad vuestras vidas rápidamente! No esperéis las Últimas Advertencias y Señales para convertiros, ¡porque después de eso, será demasiado tarde!
¡Convertíos ahora! mientras todavía hay tiempo para la Gracia y la revelación de DIOS! Hijos Míos, rezad el Rosario (pausa)
Os bendigo en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.