Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡Paz mis queridos hijos, paz!

Hijos míos, escuchad con amor mis mensajes, ponedlos en práctica y recordad todo lo que ya os he comunicado.

Vivid en la fe y en el amor. Estos son los tiempos difíciles profetizados por mí en el pasado. No pierdas tu rumbo seguro: mi Hijo Jesús. En Él está tu fuerza, tu luz, para que tengas vida en abundancia y la paz que transforma. Reza mi rosario con más amor y fe. La oración será el medio por el que ayudarás a muchos sacerdotes infieles a recuperar la luz y la gracia de Dios.

Rezad por los Ministros de Dios para que tengan la fuerza de decir siempre un verdadero sí a Dios y de ser fieles al sublime don del sacerdocio, porque muchos ya no creen en las palabras de mi Hijo y no le dan un respiro en sus corazones, porque están más llenos de las cosas del mundo que de la luz y de las palabras de Dios. Os amo a todos y deseo ayudaros a todos a encontrar la fuerza y la gracia divina para que podáis ser testigos reales y sinceros de una vida entregada en las manos de mi Hijo. Os amo, hijos míos, no lo olvidéis nunca. El Cielo os espera. Os bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.