domingo, 28 de abril de 2013

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡Paz, mis queridos hijos!

¿Queréis ser de Dios? ¿Queréis estar dentro de mi Inmaculado Corazón?... Orad, orad mucho.

Hijos, para seguir el camino de mi Hijo Jesús debéis aprender a hacer grandes renuncias. Muchas veces encontraréis pruebas y pesadas cruces, pero no os desaniméis y nunca perdáis la fe, porque yo estoy siempre a vuestro lado. Yo, vuestra Madre, os amo y estoy aquí para derramar sobre vosotros todo mi amor maternal. Interced por el mundo. Muchos se han alejado de Dios y se encuentran al borde del abismo que conduce al infierno.

Mis hijos, grandes acontecimientos están llegando pronto al mundo. Preparaos. Dios os está llamando a través de mí. Ya os he dado grandes gracias, pero muchos no escuchan. ¿Qué estáis haciendo con vuestras vidas, mis hijos? No dejéis que el diablo destruya vuestras vidas con el pecado, ni vuestras almas. Liberaros del pecado y de todas las cosas malas.

Amad pertenecer a Dios. Amad merecer el cielo. El amor lo transforma todo y os libera de todo mal. Recibid el amor de mi Hijo Jesús en vuestros corazones, para que vuestras vidas sean renovadas y glorifiquéis el Nombre del Señor por las maravillas que está haciendo en vosotros y en el mundo.

Jesús está feliz con los que acogen mis mensajes y los ponen en práctica, pero no está feliz con los que impiden a otros seguir el camino indicado por su Madre celestial.

Arrepentíos y no permitáis que el diablo os use para hacer el mal, sino pedid la luz del Espíritu Santo para tener la gracia de dar siempre testimonio con fe y amor de las obras del cielo.

Os acojo a vuestras familias en mi Inmaculado Corazón y os bendigo: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!