Miércoles de la Octava de Pascua

Una vez más, yo (Maureen) veo una Gran Llama que he llegado a conocer como el Corazón de Dios Padre. Dice: "Cuando confías en Mi Voluntad para ti, estás en paz. Entrégame tu día cuando te levantes y acepta todos los aspectos de cada momento presente como Mi Voluntad para ti. Para ello, debes entregarme tu propia voluntad. Esto significa que aceptas todos los aspectos de cada momento presente como Mi Voluntad para ti. En tu aceptación está tu entrega. Esta aceptación requiere mucho valor. El valor requiere mucha confianza. Tal vez puedas ver ahora que cada virtud se apoya en las demás virtudes. Cada virtud es tan fuerte como lo es tu amor por Mí».

"Tu vida interior debe basarse en el Amor Santo de tu corazón para ser auténtica. Es el Amor Santo el que te guía en la Verdad y se opone a cualquier fingimiento. El Amor Santo te mantiene en el camino de agradarme a Mí y no de impresionar a los demás con la profundidad de tu santidad personal."

Lee el Salmo 5:11-12+.

Pero que se alegren todos los que se refugian en ti, que canten siempre con júbilo; y defiéndelos, para que se regocijen en ti los que aman tu nombre. Porque bendices al justo, Señor; lo cubres de favor como con un escudo.