viernes, 12 de abril de 2013

La Santísima Madre habla en la noche de expiación a las 23.55 horas después de la Sagrada Misa Tridentina Sacrificial según Pío V en la iglesia de la casa en Göttingen a través de Su instrumento e hija Anne.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Durante la Sagrada Misa de Expiación de hoy, muchos ángeles se agruparon alrededor del altar de sacrificio y el altar de María. El Pequeño Rey del Amor señaló a Su corazón ardiendo de amor, que está conectado al corazón de la Santísima Madre y solo fluye amor.

Nuestra Señora hablará: Yo, la querida Madre de Dios, hablo ahora, en este momento, a través de Mi instrumento voluntario, obediente y humilde e hija Anne, que está completamente en la voluntad del Padre Celestial y solo repite Mis palabras.

Yo, vuestra queridísima Madre de Dios, la Madre del Amor, os hablo hoy en esta noche de expiación, Mis amados hijos y peregrinos de cerca y de lejos, especialmente a los peregrinos en Heroldsbach. Os saludo a todos esta noche y quiero verter muchos, muchos torrentes de gracia sobre vosotros y dejarlos fluir en vuestros corazones. El tiempo de Pascua, el tiempo de gracia, aún no ha terminado. Vuestro queridísimo Salvador, el Resucitado, os bendice a todos los que pasan por aquí y también a todos los coches que pasan. Hasta el Domingo de la Trinidad, Mi Hijo Jesucristo bendecirá a todas las personas y también derramará gracias curativas.

Mis amados seguidores, Mi amado rebaño, habéis pasado estas horas en santidad, en oración silenciosa y con muchos rosarios. Sí, el agotamiento debe ser grande en vosotros. Sacrificadlo porque será fructífero para muchos sacerdotes que se arrepientan esa noche y, sobre todo, reciban el conocimiento de Mí, vuestra queridísima Madre, porque Yo soy la Esposa del Espíritu Santo y quiero conducir a Mis amados hijos sacerdotes que se han alejado de vuelta a la verdadera Iglesia. La verdadera Iglesia es la única, Santa, Católica y Apostólica y esta única Sagrada Fiesta Sacrificial solo es válida en el Rito Tridentino según Pío V. Y esta Sagrada Fiesta Sacrificial la habéis celebrado hoy.

Cuánta gratitud Mi queridísimo Salvador, Jesucristo, os trae porque disfruta de vuestras oraciones. Muchas personas se han alejado del Santísimo Sacramento de Mi amado Hijo, el Santísimo Sacramento del Altar. Y sin embargo, sigue siendo precioso. Es el bien más precioso que podéis recibir.

Quiero agradeceros, queridos niños, queridos pequeños, porque habéis sufrido tanto en tiempos recientes y habéis sacrificado vuestras muchas enfermedades como expiación por los sacerdotes apóstatas. Quiero atraer a Mis hijos sacerdotes de nuevo a Mi corazón ardiendo de amor. En el modernismo, Mis amados hijos y amado rebaño, no pueden ser felices. Perdidos y confundidos, entran en estas iglesias modernistas y desvían a los fieles. Aunque los fieles deberían darse cuenta de ello, no van a sus iglesias de la casa, porque todo cristiano católico puede celebrar una Sagrada Misa Sacrificial en el Rito Tridentino en casa según el DVD, que podéis enviar a todos. Solo entonces tendréis las gracias completas, y os fortaleceréis, incluso en vuestros fracasos. Podéis sufrir vuestras enfermedades con paciencia y amor por Mi Hijo Jesucristo. Él camina este difícil camino con vosotros y Yo, vuestra queridísima madre, os acompaño y os formo.

No temáis todas las cosas nuevas que se avecinan. Porque no entenderéis que este papa debe ser el falso profeta. Apenas lo reconoceréis si os quedáis en el modernismo. Solo tendréis la visión cuando cumpláis la voluntad de Mi Padre Celestial en su totalidad según los mensajes de Mi mensajera.

Mi amada hija, permanece fuerte en tu predicación y no te detengas en tu ferviente oración. Os amo a todos y os bendigo en esta noche de oración y amor con todos los santos en la Trinidad, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Amados, alabados, bendita sea la Santísima Trinidad por toda la eternidad. Amén.