domingo, 9 de septiembre de 2007

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡La paz esté contigo!

Hijo mío, las personas que vienen aquí ante este altar colocan sus peticiones, pero no colocan sus buenas intenciones en querer cambiar sus vidas, hacer reparación por sus pecados y renunciar a todo por amor a Dios. Le pido a todos mis hijos que vienen aquí: ¿Dónde están sus buenas intenciones? Sean generosos, amables, obedientes, pacientes, sencillos, humildes, puros, para que puedan merecer las gracias que esta Madre amorosa y generosa quiere darles. Te amo. Oren: Ya te lo he pedido tanto y lo repito de nuevo, porque es importante. Oren para pertenecer a Dios, porque aquellos que oran son liberados de una multitud de pecados, porque la oración convierte y cura las heridas del alma. Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!