Mensajes para John Leary en Rochester NY, EEUU

 

martes, 22 de octubre de 2013

Martes, 22 De Octubre De 2013

 

Martes, 22 de octubre de 2013: (Beato Juan Pablo Ii)

Jesús dijo "Pueblo mío, sois conscientes de que, por el pecado de Adán y Eva, toda la humanidad ha heredado el pecado original y todas las consecuencias de este pecado. Por eso tenéis que morir, y por eso sois débiles para cometer pecado. No dejé huérfana a la humanidad, sino que os prometí a todos un Redentor. Por eso me encarné como un Dios-hombre. A través de Mi Santísima Madre, nací en este mundo para poder ofrecerme a Mí mismo como sacrificio perfecto e inmaculado. Así pude rescatar a todas las almas de la humanidad del pasado, del presente y del futuro. Por la gracia de Mi muerte en la cruz, puedo ofreceros a todos vosotros la salvación de vuestras almas, y puedo ofreceros la oportunidad de venir al cielo. Si Me abrís vuestros corazones y vuestras almas con amor y seguís Mis Mandamientos, entonces os abriré las puertas del cielo para daros la bienvenida a vuestra recompensa celestial. El Evangelio habla de tener vuestra alma siempre purificada mediante la Confesión frecuente, para que estéis siempre preparados para encontraros Conmigo en vuestro juicio, cuando muráis. Quiero que todos estéis preparados, aunque muráis hoy. Manteniendo tu alma pura, siguiendo Mis Mandamientos y realizando buenas obras para tu prójimo, serás encontrado digno del cielo. De las almas que se salven, puede que algunas tengan que purificarse en el purgatorio. Por eso pido a Mis fieles que recen por los difuntos y hagan rezar Misas por sus almas. De este modo, las almas podrán ser liberadas del purgatorio para ir al cielo. Os amo tanto a todos que morí para salvar vuestras almas. Lo único que tenéis que hacer es aceptar Mi regalo de salvación y seguir Mi Voluntad".

Dijo Jesús: "Pueblo mío, habéis oído hablar de algunos sacerdotes que cometieron actos de pederastia con chicos jóvenes. También ha habido hombres sorprendidos abusando de jovencitas de todas las edades. Se convierte en un delito aún peor cuando los padres u otros parientes tienen relaciones sexuales con niñas o niños de su propia familia. A veces estos abusos se mantienen en secreto, pero algunos miembros de la familia sospechan de este comportamiento, o el niño podría revelárselo a algún miembro. El padre o pariente debe saber que sus actos son pecaminosos, y debe obtener el perdón en la Confesión. Reza por los niños acosados, para que no les perjudique más adelante, cuando se casen. Si este incidente ocurre a menudo, podría dañar la confianza de los niños en sus padres o familiares si se permite que continúe. Reza por tus hijos para que nadie abuse de ellos. Estos pequeños son preciosos a Mis ojos, y no quiero que sufran ningún daño".

Origen: ➥ www.johnleary.com

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