domingo, 28 de julio de 2013

Domingo, 28 De Julio De 2013

Domingo 28 de julio de 2013

Jesús dijo «Pueblo mío, en el Evangelio de hoy enseñé a Mis discípulos a rezar con la oración del »Padre nuestro". Tiene palabras diferentes en los distintos autores de los Evangelios. Tenéis diversas intenciones para vuestras oraciones, pero muchas de ellas son peticiones de oración por vuestras necesidades, o por las almas de vuestros familiares y amigos. En la primera lectura del Éxodo, tienes a Abraham suplicándome insistentemente que salvara la ciudad de Sodoma. Empezó con cincuenta justos, y se redujo a diez justos que pudieran librar a la ciudad de la destrucción. Sabes que la familia de Lot sólo sumaba ocho justos, por lo que la ciudad fue destruida por sus pecados después de que Lot y su familia fueran expulsados. Hay algunas almas que se salvan gracias a las oraciones de sus familiares. En el caso de Santa Mónica, ella rezó por la conversión de San Agustín durante más de treinta años. Incluso tu mujer rezó por su padre durante más de cuarenta años, y éste se salvó en su lecho de muerte. Estos son ejemplos de oración perseverante que puede salvar almas. Cada persona tiene que hacer una elección de libre albedrío de amarme para salvarse, pero tus oraciones pueden mantener a un alma abierta o predispuesta a Mi amor, aunque no venga a la iglesia los domingos. Cuando vienes a Misa, Me estás rezando en Adoración, porque la Misa es la oración más grande de todas. Por eso las Misas son poderosas para ayudar a las almas a salir del purgatorio. En el Evangelio, el hombre fue persistente con su vecino al pedirle un poco de pan para sus invitados. Así Mi pueblo necesita ser persistente en sus oraciones para salvar a las almas. Cuando estás cerca de Mí en la oración diaria y en la Misa dominical, puedes mantenerte centrado en Mí en tu camino hacia el cielo. Necesito oír cuánto Me amáis cada día y no sólo una vez el domingo, porque os demostré Mi amor a todos muriendo en la cruz por vuestros pecados."