viernes, 11 de diciembre de 2009

Viernes, 11 de diciembre de 2009

Jesús dijo: “Mi gente, en el trabajo hoy en día es una lucha solo poder mantener un empleo. En el pasado, la expectativa de duración de su empleo era que, si hacían su trabajo correctamente, podían esperar aumentos constantes con el tiempo tanto por inflación como por mérito. En el mercado actual, en algunas empresas los fondos para aumentos están disminuyendo y no todos son elegibles para recibir un aumento. También es un problema constante que las empresas están recortando el apoyo a la salud a medida que las primas aumentan más rápido que la inflación. Muchos están luchando para llegar a fin de mes porque los salarios y los beneficios están limitados por las condiciones del mercado laboral. Esto es parte de la competencia mundial y la exportación de empleos manufactureros. Los ingresos de Estados Unidos se han estancado en el nivel de bajos ingresos, pero sus ejecutivos están enormemente sobrepagados por lo que hacen. Esta desigualdad es un juicio contra sus empleadores que están robando el salario a sus trabajadores. Los ricos pagarán por esto en su juicio. Pero esperen que su nivel de vida continúe disminuyendo como parte de un plan de la gente de un solo mundo. Oren por aquellos desempleados o subempleados que están aceptando salarios más bajos y menos horas. Muchos están sufriendo dificultades por la pérdida de empleos y el agotamiento de los beneficios por desempleo.”

Jesús dijo: “Mi gente, a veces sus conductos de calefacción necesitan ser limpiados del polvo y sus desagües de agua despejados para aumentar el flujo. Incluso sus arterias del corazón necesitan ser desobstruidas para evitar ataques cardíacos. De la misma manera, su alma puede obstruirse con pecados y poner en peligro su vida espiritual. Si permiten que sus pecados se acumulen sin una Confesión frecuente, entonces su alma pronto carecerá de gracia para mantenerla vibrante. Necesitan una Confesión frecuente, oración diaria y Misa diaria si es posible para construir su fuerza espiritual y mantener su alma desobstruida de sus pecados. Animen a sus familiares y amigos a hacer lo mismo para que puedan tener almas puras. Al mantener su alma siempre preparada, no tendrán miedo si yo los llamo a casa a su juicio. Manténganse cerca de Mí en Mis sacramentos, y recibirán su recompensa en el cielo.”