sábado, 3 de octubre de 2009

Sábado, 3 de octubre de 2009

(Misa Funeral de Camille Remacle)

Camille dijo: “Estoy tan feliz de haber visto a todas las personas que vinieron a mi funeral. Debo admitir que tuve lágrimas en los ojos cuando mi hermano Bill pronunció su elogio. Vi esta misma revisión de vida cuando morí, como él hablaba. Amo mucho a Babe y odié dejarte, pero sé que estará en buenas manos con Carol, Sharon y Vic. A mis hijos, solo les pido que cuiden bien a su madre como siempre lo hacen. No sientan que están solos sin mí en persona porque los estaré observando en espíritu. Estoy en el cielo ahora gracias a Carol, el sacerdote y el escapulario. Quiero agradecer especialmente a Carol y Sharon por todas las muchas horas que me cuidaron en mis últimos días. También gracias a todos los que están en el hospital y en el hogar de ancianos. Debo admitir que me gustaba más estar en casa cuando podía estar allí. Agradezco a todos mis amigos y familiares por todos sus esfuerzos para venir a mi funeral en sus viajes. Mientras me recuerden, los tengo a todos muy cerca de mi corazón. Gracias, John, por cada manera en que has ayudado a nuestra familia, y gracias por grabar mis palabras.”

Jesús dijo: “Mi pueblo, estoy permitiendo que aquellos que están abiertos escuchen las almas que se han separado de sus cuerpos. En la visión que están viendo, ven bebés en la línea de fuego que están siendo condenados a morir por sus madres abortando sus jóvenes vidas. Están escuchando los gritos de estos bebés mientras son asesinados en el vientre. También me enfrento a todos sus ángeles guardianes mientras regresan al cielo para dar testimonio de los bebés que están siendo asesinados. Mientras observan toda la carnicería humana de partes de bebés cortadas, pueden entender por qué estoy de luto por estas vidas perdidas. Les he advertido que no hagan daño a Mis pequeños, pero continúan matando a estos bebés por conveniencia o por dinero. ¿Cuánto tiempo creen que permitiré que esto continúe? Muchas de sus libertades serán eliminadas como castigo por sus malas acciones. Busquen seguirme y adorarme solo, y recibirán su recompensa en el cielo.”