sábado, 25 de julio de 2009

Sábado, 25 de julio de 2009

(Santiago)

Jesús dijo: “Mi gente, la fiesta de hoy de Santiago se trata de los dos hijos de Zebedeo que eran pescadores cuando llamé a Santiago y a San Juan para ser Mis apóstoles. La visión sobre cuidar sus redes de pesca se suma a Mi comentario a ellos. Ahora ellos serán pescadores de hombres en lugar de pescar peces. Los llamé a ustedes y a todos a una vida de verdadero amor de Dios y del prójimo sin ninguna excepción. Un amor incondicional significa que no discriminan amando solo a aquellos que les gustan, sino que deben amar a todos, incluso a sus enemigos. Mis caminos son diferentes a los caminos del hombre porque el hombre busca venganza y desea cosas terrenales. Yo deseo paz y armonía, así como solo las cosas del cielo. Sé que la naturaleza del hombre está marcada por el pecado de Adán, y ustedes están en un estado debilitado para pecar. Por eso Me hice hombre y morí por sus pecados para que pudieran ser liberados de sus ataduras del pecado. Mi muerte en la cruz ha traído a todos la salvación y la oportunidad de ser salvados en el cielo del infierno. Para elegir el cielo, deben seguir Mis Mandamientos buscando el perdón de sus pecados, y entregar su voluntad a Mí como Maestro sobre su vida. Al rendirse a Mí y a todo lo que tiene, tendrán vida eterna en el cielo.”

Jesús dijo: “Mi gente, en esta visión están viendo cómo las personas representan sus vidas en el escenario de la vida. Puede que no se den cuenta, pero todo el cielo y las almas en el purgatorio están observando y animándolos en su vida de oración. Es importante ver si Yo estoy guiando su vida por su consagración, o si la están guiando solos. A través de su vida de oración, Misas, Adoración y sus buenas obras, puedo ver cuán sinceros son al ser obedientes a Mi Voluntad y a Mis Mandamientos. Cuando ayudan a evangelizar almas a la fe, todo el cielo se regocija. Mantengan su enfoque en Mí siempre, y manténganse cerca de Mí en su fe. Los amo mucho a todos, y quiero que Me amen, y Me amen en su prójimo. Hagan todo lo posible para traer amor y armonía a todas las personas que encuentren en esta tierra. Ustedes pueden ser la única persona que invite a alguien a conocerme y amarme. Nunca se rindan al orar para salvar almas en su familia, ya que pueden ser su salvación con Mi ayuda. A medida que avanzan en la vida, sean conscientes de que muchos están observando sus acciones, y quieren ser un buen ejemplo para ganar almas al cielo. Llámenos en sus momentos oscuros, y llamen al Espíritu Santo para que les den las palabras correctas necesarias para ayudar a salvar almas. Cuando regresen a Mí y la representación de sus vidas haya terminado, todo el cielo los recibirá cuando reciban su corona de santidad.”