viernes, 14 de noviembre de 2008

Viernes, 14 de noviembre de 2008

Nuestra Señora dijo: “Mi querido hijo, San Juan el Evangelista me honra en la primera lectura, como sabes que cuidó de mí. Soy tu Bendita Madre, y responderé a tu petición de velar por ti con mi manto mientras sales a hablar. Te acercas al Día de Acción de Gracias, y es un buen detalle que también me estés agradeciendo por cuidar de mis hijos. Dondequiera que veas a mi Hijo, Jesús, yo también estoy allí, ya que nuestros corazones están unidos como uno. Continúa rezando tus rosarios todos los días por mis intenciones. Los amo a todos, y el cielo se regocija por incluso una sola alma que se convierte a la fe.”

Nuestra Bendita Madre dijo: “Mis queridos hijos, les agradezco por rezar mi rosario, y mi Jesús está muy contento con sus oraciones. Esta rosa que se les dio representa el símbolo para aquellos que trabajan por el Derecho a la Vida por los no nacidos. Deben estar preparados, mis hijos, de que aquellos a favor del aborto impondrán su voluntad sobre sus buenas intenciones. Incluso si parece que sus esfuerzos para detener el aborto están siendo frustrados, no abandonen esta lucha y continúen rezando por el fin del aborto en América. Quiero que oren por la gente de California porque sus recientes incendios son una respuesta a aquellos que desean matrimonios homosexuales y la prostitución legalizada. Están poniendo a prueba la mano de justicia de mi Hijo, Jesús, en sus estilos de vida pecaminosos. Continúen rezando por toda América porque están siendo probados con problemas financieros que eventualmente conducirán a una toma de control de su país. Tal como ves esta cueva en la visión, ora por todos tus lugares de refugio que te protegerán durante la próxima tribulación. Están viendo una gran batalla del bien y del mal, así que mantente cerca de los sacramentos de mi Hijo en la Confesión y la Sagrada Comunión porque necesitarás las gracias de mi Hijo para protegerte de los malvados que intentarán matarte.”