domingo, 2 de marzo de 2008

Domingo, 2 de marzo de 2008

Jesús dijo: “Mi gente, el Evangelio de hoy les muestra cuán fuertemente los fariseos no querían creer que Yo curé al ciego. Interrogaron al ciego dos veces y a sus padres, e incluso frente a un milagro real, echaron al hombre porque cuestionó por qué no creían en Mí. A los fariseos no les gustaba el hecho de que Yo curé al hombre en el Sabbath. Al no creer en Mis milagros y llamándome a Mí y al ciego pecadores, pensaron que ahora no tenían que creer que fui enviado de Dios. Esta caja vacía en la visión representa su incredulidad de que Yo era el Hijo de Dios. Pero si el Padre me envió, entonces se negaron a creer en la Segunda Persona de la Santísima Trinidad. Por eso dije que si ven en un sentido terrenal, entonces todavía están en su pecado y son espiritualmente ciegos a Mi amor. Es lo mismo para la gente de hoy. Si la gente no quiere creer en Mí como su Salvador, y no quieren buscar Mi perdón por sus pecados, entonces todavía están inmersos en sus pecados, y están arriesgando los fuegos del infierno.”

Jesús dijo: “Mi gente, esta es una escena muy difícil de ver tantos cuerpos espirituales dejando sus cuerpos muertos como resultado de un virus pandémico que será muy letal. Este virus se propagará por los rastros químicos y la gente de un solo mundo se protegerá con una vacuna antídoto para este virus. Les estoy diciendo a Mi gente nuevamente que fortalezcan su sistema inmunológico con píldoras o té de espino blanco, junto con otras hierbas, vitaminas y nueces. Una vez que vean que esta pandemia comienza con muchas personas muriendo, sería un buen momento para llamarme para que los guíe a sus refugios donde serían curados de todas las enfermedades bebiendo el agua del manantial curativo, y mirando la cruz luminosa. Los malvados intentarán reducir la población para que tengan menos gente que controlar. Este tiempo de tribulación será breve antes de que Yo venga y arroje este lote malvado al infierno. Mis fieles entonces se alegrarán de vivir en Mi Era de Paz.”