viernes, 31 de agosto de 2007

Viernes, 31 de agosto de 2007

Jesús dijo: “Mi gente, este Evangelio de las cinco vírgenes prudentes y las cinco vírgenes insensatas es un tema de estar vigilantes a cuando yo regrese en victoria. Les he dado muchos mensajes de advertencia para preparar a Mi gente para el tiempo de tribulación con el breve reinado de maldad del Anticristo. Están continuando viendo señales de esta edad malvada como en los tiempos de Noé, y la fe se ha enfriado en muchos corazones. Están viendo las áreas de pestilencia, guerras y hambruna en partes del mundo. También están viendo los microchips forzados en sus pasaportes y las próximas licencias como la marca de la bestia ya está preparada. Están entrando en los últimos tiempos ya que las señales están a su alrededor. Estén siempre listos en su alma con la Confesión frecuente y una fuerte vida diaria de oración. No sean como las cinco vírgenes insensatas que no pudieron entrar porque no conocían ni el día ni la hora de Mi regreso.”

Jesús dijo: “Mi gente, en cada vida van a ser probados en el lugar de trabajo, en la carretera y en la administración de su hogar. Se encontrarán con muchas frustraciones y decepciones, ya que esto es parte de su condición humana. Es cómo reaccionan a las situaciones de la vida lo que tendrá un efecto en su disposición y el efecto que tienen en los demás. Si son jactanciosos o tienen una actitud alterada por las cosas, pueden hacer que ellos mismos y otros estén miserables a su alrededor. Si tienen una actitud calmada y fiel, su amor puede tocar a otros y ellos estarán agradecidos de estar en su presencia. Una persona de profunda fe no debe permitir que las pequeñas cosas de la vida perturben su paz. Esto requiere algo de paciencia y una buena vida de oración para refrenar su ira e irritabilidad. Así que deténganse y piensen cómo otras personas están viendo sus acciones, e intenten ser buenos ejemplos cristianos para otros para que deseen el amor que tienen por Mí. Manténganse calmados en todas sus reacciones para que puedan tener respeto por Mí, ustedes mismos y su prójimo.”