domingo, 17 de octubre de 2010

Mensaje de San José

Mis amados hijos, YO, JOSÉ, los bendigo nuevamente hoy y les doy paz!

En Mi Corazón Amadísimo siempre tendrán un hogar, refugio y abrigo. Siempre los mantendré en Él. Siempre los amaré en Él. Siempre los llenaré de las gracias y los dones de Dios y del Espíritu Santo en Él. Y es en el Santuario de Mi Corazón Amadísimo donde los haré crecer cada día más en amor y santidad.

Entren en Mi Corazón Amadísimo, a través de su continua, perseverante oración, cada vez más ardiente de amor, cada vez más llena de confianza y fe, ciertos de que Yo soy su Padre y así como un padre no da una piedra a un hijo que le pide pan y no da una serpiente a un hijo que le pide un huevo, Yo tampoco les daré nada que les haga daño. Siempre les daré gracias de amor, gracias de paz y salvación. Tal vez no esa gracia que pedirían porque se convertiría en un apego para ustedes y haría daño a su alma, pero les daré esas gracias que Dios decide son las mejores para ustedes!

Siempre elegiré las más copiosas, abundantes y saludables bendiciones del Señor para ustedes. Siempre les daré gracias del amor del Señor, que transformará su vida en un verdadero río de vida divina, de gracia del Señor, de bendición y paz.

Entren en Mi Corazón Amadísimo, por lo tanto, a través de una oración confiada, porque es la llave que abre la puerta de la bóveda de Mi Corazón para ustedes, donde puedo darles los tesoros de Mis gracias, tesoros que son el fruto de Mis méritos, de Mis méritos, de los sufrimientos, de los trabajos que he padecido en Mi vida mortal y con los cuales he obtenido gran gloria en el Cielo. Los frutos de Mis méritos, Mis amorosas gracias quiero dárselos a cada uno de ustedes, hasta que se vuelvan ricos, extremadamente ricos de Mis gracias. Y para obtener esta Mi riqueza deben venir a Mí con la llave dorada, la llave de la confianza, la llave de la oración confiada, y Yo les abriré el cofre de Mi Corazón, de Mis tesoros y los enriqueceré a todos.

Entren en Mi Corazón Amadísimo, a través de una perfecta 'Consagración' de todos ustedes a Mi Corazón Amadísimo. Mientras los Mensajes sobre la verdadera devoción a Mí no se completen aquí en estas Apariciones, deben esperar el momento en que toda la Consagración a Mí les sea explicada. Pero antes de eso, ya pueden consagrarse a Mí de una manera personal, diaria y continua, dándose a Mí cada día, encomendándose a Mi protección en cada momento, viviendo cada vez más unidos a Mí por una vida de profunda oración, de meditación sobre Mis Mensajes, rezando Mi Hora cada domingo y también en otros momentos como puedan, haciendo con Mí verdaderamente una vida, una vida en Dios. Para que Nosotros, inseparablemente unidos, podamos caminar cada día y Yo los guíe cada vez más por el camino de salvación que el Señor muestra, ofrece e invita a cada uno de ustedes aquí hace 20 años a través de estas Apariciones!

Entren en Mi Corazón Amadísimo, dándome su SÍ, el SÍ a todo lo que les he pedido en Mis Mensajes, el SÍ a todo lo que les inspiro, a todas las buenas ideas que les doy en la oración. El SÍ a todo lo que Dios les pide cada día, para que puedan ser verdaderos hijos de Dios, verdaderos cristianos que defiendan la fe cristiana, que defiendan los principios cristianos, que defiendan la Ley del Señor. Para que con toda su vida transformada en Dios, puedan ser una señal del amor de Dios, de Su gracia, de Su presencia, de Su amor y de Su Misericordia en el mundo.

A todos ustedes Mis queridos hijos, los bendigo en este momento generosamente, dándoles cada vez más de Mi paz. Extiendo Mi Manto sobre ustedes, los cubro con él. ¡Los amo mucho! ¡No se aparten de Mí! En momentos difíciles invoquen a Mí y sentirán Mi consuelo, sentirán Mi confort en su alma. En tiempos de aflicción y tristeza estoy más cerca de ustedes y más unido a ustedes que la madre con el hijito en su vientre.

A todos en este momento, les doy Mi paz".

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CONSAGRACIÓN AL CORAZÓN AMADÍSIMO DE SAN JOSÉ

"-Ó Corazón Amadísimo de San José, digno de ser sobre todos amado, venerado y obedecido con sincero afecto. A ti me consagro, con todos mis bienes interiores y exteriores, con todo lo que soy y tengo. Tu eminencia, gloria y poder superan todo entendimiento humano. Y por esta razón, te tomo hoy como mi abogado con Jesús y María, mi protector y Padre prometo nunca olvidarte y separarme de ti, deseo honrarte cada día de mi vida, obedecer tus Mensajes comunicados en las Apariciones de Jacari, hacer tu HORA SANTA de oración cada domingo a las 9:00 de la noche, obedecer todos los Mensajes de María Santísima y de Nuestro Señor en las Apariciones de Jacari, y difundir tu devoción y tus Mensajes a todos. ¡Oh Padre de mi alma! Concédeme tu protección especial y acéptame en el número de tus siervos. Asísteme en todas mis acciones y sufrimientos, obtén el favor de Jesús y María y no me falles por piedad en mi agonía y muerte. ¡Oh Corazón Amadísimo de San José, que te revelaste con los Corazones de Jesús y María en las Apariciones de Jacari, ten piedad de nosotros y del mundo entero. Amén".

(Oración compuesta por el vidente Marcos Tadeu, grabada en el CD de la Hora Santa de San José, disponible en el Santuario de las Apariciones en Jacareí para aquellos que deseen adquirirla, por favor contáctenos)

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"RECUERDA A SAN JOSÉ

Recuerda, Oh Esposo Castísimo de la Virgen María, San José, mi AMADO Protector, que ninguno de aquellos que invocaron tu protección y rogaron tu ayuda, jamás quedó sin consuelo. Lleno de confianza, me presento ante ti y me recomiendo, con fervor a tu Patrocinio.

¡Ah! No desprecies mis oraciones, Oh Buen Padre que nutre al Redentor, sino escúchalas favorablemente, y dignate aceptarlas. Ámalas.

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BREVE ACTO DE CONSAGRACIÓN A SAN JOSÉ

Oh mi Señor y mi Padre, me ofrezco completamente a Ti, y en prueba de mi devoción a Ti, te consagro este día y para siempre: mis ojos, mis oídos, mi boca, mi corazón, y enteramente mi ser, y porque soy todo tuyo, Oh mi Buen e Incomparable Padre, guárdame y defiéndeme como cosa y propiedad tuya. Ámame.

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"El Inmaculado Corazón de mi Dulce Esposa Eterna María, es la puerta al Cielo, ¡y la devoción a Mí y a Mi Corazón, es la llave que abre esta puerta!

Invócame siempre así:

CORAZÓN QUERIDÍSIMO DE SAN JOSÉ, REZA POR NOSOTROS!

Y Yo vendré, vendré en ayuda de todos ustedes, la iglesia, el mundo, las almas. Cuando vean Mi Luz, Satanás quedará ciego y ya no podrá hacerles más daño.

(SAN JOSÉ, Jacareí 7/9/99)