jueves, 6 de agosto de 2009

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡La paz esté con ustedes!

Queridos hijos, hoy les doy el abrazo de su Madre. Gracias por sus oraciones, penitencias y sacrificios. No pueden imaginar cuántos males han sido alejados de su país y del mundo. Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!

Nuestra Señora, en este día, apareció inesperadamente, cuando acabábamos de terminar de rezar el rosario caminando de rodillas alrededor del lugar donde estábamos. Habíamos ofrecido esta penitencia a ella por los pecadores y al mundo, y ella muy amablemente apareció para decirnos que con lo poquito que habíamos ofrecido a Dios habíamos alejado tantos males de Italia y del mundo. Cuán importantes son las oraciones, los sacrificios y las penitencias hechas con amor. Con tan poquito Nuestra Señora obtiene de Dios todo con sus gracias y la intercesión de Madre.