jueves, 5 de febrero de 2009

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Trieste, Italia

¡La paz esté con vosotros!

Queridos hijos, una vez más vengo del cielo para daros el mensaje que mi Señor os envía para deciros. Rezad, hijos míos, si deseáis el fin de tantas cosas malas en el mundo.

Muchos de mis hijos se han alejado de Dios. Sed vosotros los que intercedáis por la conversión de vuestros hermanos alejados. ¡Cuántas veces he rogado ante mi Hijo Jesús por vosotros, para que os perdone vuestros pecados! Así también, vosotros debéis perdonar y rezar por todos aquellos que os han ofendido, intercediendo también por ellos, para que se conviertan. No perdáis la fe. Mi Hijo Jesús está siempre cerca de vosotros y quiere ayudaros. Sed totalmente de mi Hijo con vuestro corazón.

Bendigo vuestras familias y llevo vuestras peticiones al cielo. En este lugar bendecido por vuestra Madre celestial, Dios os concederá grandes gracias. ¡Cuánto deseo que todos vosotros seáis obedientes a mis llamadas y así viváis la santidad profundamente! Muchos aún están lejos de Dios y vosotros, hijos míos, debéis ayudarlos. Que los jóvenes sean testigos del amor de Dios por los jóvenes, que las parejas estén para otras parejas, las madres para otras madres, y así sucesivamente. No perdáis el tiempo. Es tiempo para un cambio de vida, para eliminar toda la suciedad de vuestros corazones y de vuestras familias. Dios os está llamando. Volved a Él. Os bendigo y os digo que estoy muy feliz de que estéis aquí. Regresad a vuestros hogares con la bendición de Dios y con el amor de vuestra Madre. Os bendigo a todos: en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Amén!