jueves, 5 de octubre de 2006

Mensaje Mensual a Todo Pueblo y Cada Nación

Mensaje de Jesucristo dado a la Visionaria Maureen Sweeney-Kyle en North Ridgeville, EE. UU.

Jesús y la Santísima Madre están aquí con Sus Corazones expuestos. La Santísima Madre dice: "Alabado sea Jesús." Jesús dice: "Soy tu Jesús, nacido Encarnado."

Jesús: "Hoy los llamo, Mis hermanos y hermanas, a unirse en el Amor Santo y Divino. Este es el camino de la salvación--el camino de la vida eterna. Es la Verdad duradera y Eterna. No es solo Mi invitación a ustedes, sino Mi súplica."

"Edifiquen la unidad entre ustedes viviendo según el Amor Santo. No permitan que Satanás erosione esta Verdad Eterna que he colocado en sus corazones a través de opiniones, ambición y agendas ocultas. Como los Remanentes Fieles, comprendan plenamente su obligación de ser misioneros del amor en un mundo que busca su cumplimiento solo a través del amor propio. No abandonen Mi llamado a ustedes--de ninguna manera. Reconozcan que Mi plan para ustedes no es solo para su propia salvación, sino para la salvación de quienes los rodean."

"Hay ciertas ideologías que son contrarias al Amor Santo. Estas ideologías destructivas han consumido naciones enteras. Por lo tanto, hoy llamo a Mis Remanentes Fieles a convertirse en una nación de Amor Santo y Divino--una nación que se mantendrá firme en la verdad. Esta nación de amor tendrá su corazón en el Cielo, y no sucumbirá a las insidiosas mentiras de Satanás."

"Como una nación santa, formada en la Voluntad Divina, que su Constitución sean los dos grandes Mandamientos del Amor. Su bandera debe estar formada por la confianza--siempre avanzando frente a ustedes--enfrentándose al enemigo de frente. Su enemigo toma la forma de cualquier cosa que se oponga a la ley del amor. Su escudo de armas son los Corazones Unidos, siempre representando la verdad misma. Su línea de defensa es el Escudo de la Verdad de San Miguel."

"Estén vigilantes contra el enemigo que intenta sembrar dudas entre ustedes. Reconózcanlo. Una vez que lo vean, pueden derrotarlo con la verdad y a través de la oración y el sacrificio. Aspiren solo a la pequeñez. Sean ambiciosos solo por la santidad. De esta manera, siempre serán un ciudadano fiel en la nación remanente del amor."

"Mis hermanos y hermanas, los llamo a todos juntos ahora a unirse en el Amor Santo como una nación gobernada por la Voluntad Divina de Mi Padre Eterno. No sucumbirán a ningún error, y resistirán la persecución con gracia."

"Los estamos bendiciendo con la Bendición de Nuestros Corazones Unidos."